Asesor de Donald Trump sostiene que el expresidente no requiere hacer uso de códigos de trampa para debatir frente a Kamala Harris la próxima semana
En el equipo de campaña de Donald Trump aseguran que mientras su rival Kamala Harris se somete a cursos intensivos para debatir la próxima semana, el candidato presidencial republicano le resta importancia al evento, pues está convencido de que su proyecto de nación es el mejor y no requiere de trucos para demostrarlo.
Durante una entrevista concedida a la cadena de televisión ABC News, Brian Hughes, asesor principal de la campaña del republicano de 78 años, señaló que su experiencia lo sacará avante en el intercambio de opiniones y conceptos programado para el efectuarse el martes de la semana entrante.
“Nuestro debate y preparación son todos los días. Se trata de Donald Trump hablando con los votantes. Docenas de entrevistas sin guion y puede permanecer con periodistas sin guion durante horas, no necesita códigos de trampa del personal para entrar en un debate“, indicó.
Desde hace tiempo, el magante neoyorquino ha dejado atrás los debates simulados y se concentra en pulir el mensaje que pretende sembrar entre los estadounidenses, pues caer en el escenario a donde pretende colocarlo Kamala Harris para que estalle, podría significarle perder en una noche todo lo que ha construido durante meses para colocarse por tercera ocasión en la antesala de la Casa Blanca.
Bajo este enfoque, los republicanos contrataron a la exrepresentante demócrata Tulsi Gabbard para enseñarlo a ser paciente hasta que Kamala Harris sea quien cometa el primer error al hablar de sobre su propuesta de gobierno.
Y es que a pesar del halo de popularidad que le ha logrado construir su equipo de campaña, al evitar que dialogue directamente con la prensa, la californiana de 59 años ha demostrado ser vulnerable a perderse entre sus propias ideas, incluso emitiendo frases accidentadas, como ocurrió el año pasado en al menos tres ocasiones durante eventos de bajo perfil.
Sin embargo, Kamala Harris lleva semanas recibiendo la capacitación de expertos en debatir enfocados en evitar que se replique una actuación similar a la registrada con Joe Biden, cuando literalmente sucumbió ante la presión de saber que millones de estadounidenses permanecían atentos para verificar su fortaleza física y mental de cara a la posibilidad de permanecer otros cuatro años al frente de la Casa Blanca.
Por Evaristo Lara